3 jun 2011

Capítulo 6


Otra vez lunes. Tenía matemáticas a primera hora y el profesor no había venido. ¡Ya podía haber avisado! Así habría dormido un poco más. Como a la mitad de la clase salí al baño a beber agua. Cuando volvía a clase una voz que conocía muy bien preguntó:
-¿Esa clase es 2ºA?
-¿Este año no te lleva la directora?- Contesté girándome.
-Me ha dicho que no hacía falta, que una chica alta, con el pelo castaño y que estaba el año pasado en mi clase también lo estaba este año- dijo encogiéndose de hombros y sonriendo. Abrí la puerta.
-Las damas primero- puse los ojos en blanco y entré seguida por Jake. Nadie prestó mucha atención porque o bien estaban hablando en grupos o haciendo deberes. Éramos 15 en clase y al ser impares, había alguien que se sentaba solo y menos mal que no era yo, porque si no me iba tocar aguantar a Jake pero por cosas de la vida mi compañera no había venido y ¿dónde fue Jake a sentarse? A mi lado.
-¿Qué asignaturas tienes?- Le pregunté.
-Matemáticas, biología, psicología y química ¿por?- ¿Por qué? Porque quería saber si tenía las mismas asignaturas que yo… y así era.
-Para saber si coincidíamos en alguna clase. Lo hacemos en todas, que casualidad ¿no?
-Si, si mucha casualidad- dijo riéndose.
-Lo has hecho aposta- dije mirándole enfadada.
-No tienes pruebas- contestó tan contento.
La siguiente hora tocaba lengua, que además era nuestro tutor. Perdimos prácticamente la mitad de la clase en la presentación de Jake y luego seguimos analizando frases.
En historia nos sentábamos por orden alfabético. El profesor comenzó a pasar lista y a decir dónde nos sentábamos: Eva Ruiz, Álvaro Sánchez, Jake Smith se sentaba detrás de mí.
Ya había empezado la clase cuando no se muy bien porque Álvaro me puso el brazo sobre los hombros y yo empecé a reírme. Pero paré cuando una patada en mi silla hizo que avanzara un poco hacia delante. Me giré.
-¿Qué pasa?- Pregunté sonriendo.
-Nada, solo me estiraba- estaba serio, yo sonreí más.
-La próxima vez hazlo con un poco más de cuidado ¿vale?
Me giré sin darle tiempo a responder. ¿Le había molestado lo que había hecho Álvaro? Se iba a enterar. Esta vez, le mandé una nota a Álvaro, volvió a poner su brazo sobre mis hombros y yo apoyé mi cabeza en su hombro. Una patada. Otra.
-¿Pero de que año a qué año es el Sexenio Absolutista?- Preguntó Jake, lo que hizo que el profesor se fijara en nosotros.
-Ruiz, Sánchez sentaros bien- miró a Jake- de 1814 a 1820.
Cuando el profesor siguió con la explicación un papel doblado voló hasta mi mesa. Lo abrí.
“Por qué me haces esto?” “El qué?” Contesté. “Lo sabes perfectamente” “No, no lo se” “si lo sabes” “ y tú también sabes por que lo hago” “si” “pues eso” “no crees que sería mejor arreglar las cosas?” “ Es una opción” “ cuando te parece bien hacerlo?” “En el recreo o es que va a hacer mucho frío?  (Cosa que no me creeré ya que estabas en mitad del bosque en invierno sin camiseta)” “vale”
Sonó la sirena y bajamos al recreo.
-Voy un momento a la cafetería a por un bocadillo ¿va?
Cuando salí, le di un regaliz que le había comprado.
-Gracias- dijo sonriendo.
-No hay porque darlas, venga empieza- dije mientras le daba un mordisco al bocata de beacon.
-¿No me vas a dar un poquito?- Preguntó con cara de no haber roto un plato en su vida.- Ya sabes al hombre se le conquista por el estómago- suspiré poniendo los ojos en blanco y le di un trozo- muchas gracias- dijo sonriendo- y lo siento, por haberme ido, vuelto y volver como volví.
-¿Y ya está?- Intentaba que no se diera cuenta de que le estaba vacilando.
-¿Cómo que y ya está? ¿Qué quieres que te diga?
-No se, lo alta que soy, lo guapa que soy- me encogí de hombros- por ejemplo.
-Pero eso ya lo sabes- sonrió y me tendió la mano- ¿amigos?
Me quedé un rato mirando la mano, luego miraba a Jake y volvía a su mano y finalmente le abracé.
-Amigos.
-Pues amiga mía, esta tarde entrenamiento a las 7.
-¡Nooo! –Mentí a medias, porque no me apetecía nada pero por otro lado lo que Jake no sabía era que me había apuntado a un gimnasio y estaba en forma. Y que me habían enseñado un poco de defensa personal.

No hay comentarios: