En el recreo decidí quedarme en clase y no bajar. Empecé a pasar apuntes a limpio cuando Alberto apareció.
-¿Qué tal tu nariz?
-Bueno, me duele un poco, pero no tanto como ayer, muchísimas gracias por decirme como colocármela.
-Me alegro de que estés mejor, cuando me llamaste me asusté.- Sonrió- por cierto ¿dónde te metiste el sábado?
-Me fui a la tienda de chuches sola, porque nadie me contestaba y cuando volví al sitio donde me tendrías que haber esperado no había nadie, bueno estaba Tyler.
-Siento no haberte escuchado, de verdad.- Se quedó en silencio un rato- ¿Cómo te rompiste la nariz? Porque, no se, para rompértela con una pared... no se las paredes se ven. Si te lo hizo alguien, me lo puedes contar, sabes que puedes confiar en mí.
-Se que puedo confiar en ti, de verdad que me lo hice yo sola, ya te lo dije me comí una pared- me encogí de hombros- tenía hambre- sonreí.
-Vale, pero te lo vuelvo a decir, las paredes se ven, ¿fuiste corriendo hacia una para ver si podías atravesarla? Creo que eso solo lo pueden hacer los fantasmas- dijo riéndose, me reí con él.
-Ya se que no puedo atravesar paredes- ¿le podría decir a Alberto lo de los “entrenamientos”?- es que estaba jugando con Leo y Tor en el sótano de Tyler a oscuras.....y me comí la pared.
-¿Casa de Tyler? ¿Jake no vive también allí? ¿Qué hacías jugando a oscuras?
-¿Es esto un tercer grado?- Me reí- si, también vive allí son hermanos ¿recuerdas? Da igual. Tyler quiso hacer la gracia y apagó la luz.
-¿Por qué no te ayudó Tyler?
-Alberto, ¿porque me preguntas todo esto?
-He preguntado yo primero- sonrió.
-Porque no le encontré, por eso. Te toca.
-A vale, me tengo que ir, me esperan abajo.
-¡Alberto! ¡No me has respondido!
-¡Otro día!- Me gritó desde el pasillo.
Las clases terminaron antes porque la profesora de última hora no había venido y nos dejaron salir antes.
Cuando llegué a casa comí lo más deprisa que pude para poder descansar, es decir, tirarme en el sofá y vaguear. Al final de tanto “descansar” no hice nada, bueno, vi la tele, que ya es algo. A eso de las 7 me llegó un sms diciendo que no había más entrenamientos esta semana, la verdad me alegraba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario